El pomelo es una fruta llena de beneficios para la salud aunque no es de las más consumidas en nuestro país. ¡Anímate a probarla!

El pomelo también es conocido como toronja. Pertenece al género de los cítricos al igual que la naranja o el limón.

El pomelo es más típico de los climas subtropicales, aunque podemos encontrarlo en países con unas temperaturas más bajas. Los principales países productores de pomelo son Estados Unidos y China. Por otro lado, en España, poco a poco va aumentando el consumo de esta fruta.

El pomelo solo tiene alrededor de 37kcal por 100g. El aporte calórico del pomelo es inferior al de otras frutas que solemos consumir más, como pueden ser la naranja o mandarina. En estos 100g. de pomelo, el 90% que nos encontramos es agua. Esta fruta nos aporta unos 7g. de azúcar por 100g. y unos 1,5g. de fibra. Estas características hacen que tenga un efecto saciante. 

Además, el pomelo es una gran fuente de vitaminas y minerales. La primera destacable, característica de los cítricos, es la vitamina C. El pomelo nos aporta unos 36mg/100g. La vitamina C tiene función antioxidante, nos protege frente a determinadas enfermedades y mejora la absorción del hierro no hemo.

La toronja también nos aporta unos 14µg/100g de ácido fólico (vitamina B9). Importante para tratar ciertas anemias y prevenir defectos en el feto durante el embarazo.

Asimismo, en el pomelo encontramos vitamina A y betacarotenos, necesarios para tener una buena visión.

Respecto al contenido de minerales, destacamos el magnesio y el potasio. El magnesio que contiene, unos 9,6mg/100g. es importante para mantener el equilibrio ácido-base y transmisión del impulso nervioso, entre otros. El potasio (148mg/100g.), por otra parte, mantiene el equilibrio osmótico y participa también en el impulso nervioso.

El pomelo, además, al igual que el limón o la naranja, se utilizaban tradicionalmente para tratar los resfriados. La vitamina C que contiene no previene resfriados o gripe pero disminuye la sintomatología.

Otra de las características del pomelo está relacionada con la insulina. El pomelo contiene naringenina, un tipo de flavonoide con efecto antioxidante, antiinflamatorio y otros efectos beneficiosos para la salud.

En un estudio realizado en Canadá, esta sustancia mejoraría la resistencia de las células a la insulina. Según esta investigación, consumir pomelo 2-3 veces al día disminuiría los niveles de glucosa en sangre.

De esta forma, también reduce el riesgo de padecer diabetes tipo II.

Otro beneficio del pomelo afecta a los niveles de colesterol. La naringenina, el flavonoide comentado anteriormente, sería la responsable de ello. Esta sustancia estimula al hígado en la degradación de las grasas, provocando así una reducción de colesterol y triglicéridos.

Esto es beneficioso para aquellas personas con colesterol elevado y que no se toman medicación para ello.

Otra propiedad, de las más conocidas del pomelo, es su capacidad diurética. Esto se debe al bajo contenido en sodio de esta fruta.

El pomelo también supone una alternativa a otros cítricos más consumidos, como son el limón, naranja o mandarina.

Es cierto que el pomelo interactúa con algunos medicamentos.

Las sustancias presentes en el pomelo pueden provocar el aumento o disminución de la concentración del medicamento en sangre. Es importante saber a qué fármacos puede afectar y qué hay que tener en cuenta.

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